El enemigo mortal de Robo-Cruac, Mako, merodea por las aguas de Ciudad Anura. Antes era un buzo de las profundidades novato, pero Mako se transformó en tiburón tras indagar demasiado en un templo sumergido.
Atrapado por los vengativos espíritus del océano, se convirtió en su leal sirviente. Nada está a salvo de este villano, ni las cloacas.
Atrapado en una batalla constante con su némesis robótica, hará lo que sea para que Ciudad Anura regrese al abrazo del océano.